Se escapa de la cárcel vestido de mujer
El narcotraficante mexicano Joaquín “El Chapo” Guzmán construyó todo un túnel para escapar de prisión, pero quizá no supere lo que ha hecho el narco paraguayo César Ortiz, aka el “Gordito lindo”, para fugarse del Penal de Tacumbú el pasado 29 de mayo.
A diferencia de El Chapo, Gordito lindo, de 36 años, no se quebró tanto la cabeza para fugarse: le bastó una peluca, algo de maquillaje, unas relucientes uñas postizas, una falda y un brasier para huir de la principal cárcel de Paraguay, ubicada en las márgenes de la capital de Asunción.
Ortíz, que es el segundo del Clan Rotela dedicado al tráfico de crack, aprovechó un día de visita y junto a una mujer entró en una de las habitaciones privadas de la cárcel. Cuando salió era una persona completamente distinta… o algo así.
Su disfraz de mujer fue tan creíble, aparentemente, que Gordito pudo salir como si nada por la puerta principal de la cárcel, como quedó documentado en las imágenes del circuito cerrado del penal de Tacumbú.
Las grabaciones muestran el momento en que, curiosamente, un guardia de seguridad le abre la puerta a una mujer, que en realidad era Ortiz, para que pudiera salir plácidamente de la prisión junto a un hombre al que tampoco se le realiza ninguna revisión de seguridad.
Aquí tienes la grabación:
Sin embargo, la libertad le supo a poco a Gordito cuando recapturado a tres cuadras de la prisión para ser enviado a la penitenciaria de Emboscada, en donde presuntamente su familia ha denunciado que su vida corre peligro.
Antes de su efímero escape de la cárcel, Gordito lindo llevaba tres años, nueve meses y 20 días preso por robo agravado, hurto especialmente grave y reducción. En cuanto a las autoridades de la prisión, se apartó de sus funciones al director, Manuel Garay, y al menos unos 20 agentes penitenciarios que prestaban su servicio en el ingreso principal del penal en el horario de la fuga.