Papá pierde a su hija y ella lo encuentra 20 años después
Una joven llamada Yulia Gorina de 24 años de edad, se reencontró con su familia luego de desaparecer misteriosamente en 1999, cuando tenía 4 años y viajaba junto a su padre en un tren.
La recopilación de los hechos indica que cuando su papá se quedó dormido, Yulia desapareció misteriosamente y nunca más volvió a ser vista por su familia, quienes durante veinte años la buscaron sin perder la esperanza de que la menor siguiera con vida.
Durante días estuvimos buscándola, tomando todos los trenes desde Minsk a Asipovichy y de regreso, preguntando a los pasajeros si habían visto a Yulia. Revisamos pozos, tiendas, casas desiertas, todo”.
Dijo Lyudmila Moissenko, madre de Yulia.
Con la ayuda de su novio, Ilya Kryukov, la joven pudo buscar el paradero de sus padres en Internet, encontrando que éstos vivían a 400 kilómetros de su actual hogar.
Sin pensarlo dos veces, la joven de Bielorrusia contactó a su familia biológica y pactaron una reunión en una estación de policía en Bielorrusia. Una vez allí, al realizarse una prueba de ADN, la joven confirmó que había hallado a sus padres después de tanto tiempo y el reencuentro fue inminente.
Al contar las dos versiones de la historia, Yulia confesó que hasta la fecha no tenía en claro cómo había llegado hasta Ryazan, Rusia, a más de 800 kilómetros de su hogar, por lo que se cree que fue víctima de un intento de secuestro.
Sus padres fueron acusados en Bielorrusia de haberla asesinado, pero la investigación se cerró tras carecer de pruebas, siendo reabierta hasta 2017, cuando las autoridades trataron de retomarla.
La joven fue adoptada por una pareja al no tener un hogar a donde ir, por lo que ahora vive en Ryazan y tienen una hija llamada Kristina.
Yulia y su padre recorrieron la estación de tren donde la joven se extravió, y él, conmovido por tenerla de regreso en su vida, le pidió perdón que la joven aceptó en el acto.