Japón quiere reanudar la caza comercial de ballenas
Japón va a solicitar la reanudación de la caza comercial de ciertas especies de ballena, tras 30 años de suspensión total, en la reunión que la Comisión Ballenera Internacional (CBI) celebrará en septiembre en Brasil, informaron medios locales.
Este país asiático busca que se permita la captura comercial de algunas especies como la ballena minke (rorcual aliblanco), de la que estima que hay un número relativamente abundante de ejemplares, según la propuesta del primer ministro, Shinzo Abe, aprobada el pasado 26 de junio.
La reunión de la CBI se celebrará entre el 10 y 14 de septiembre en Florianópolis, Brasil, y estará presidida por Joji Morishita, representante del gobierno japonés.
Durante el encuentro, Japón planea dar a conocer la caza comercial de cetáceos como su propuesta principal junto con otras ideas, como una revisión del sistema de toma de decisiones del organismo, según recogió la agencia Kyodo.
Dicha revisión de toma de decisiones se basa en lo siguiente: la Comisión Ballenera Internacional establece actualmente que es necesario obtener la aprobación de tres cuartas partes de sus 88 miembros para establecer cuotas de captura o zonas ‘santuario’ donde la caza de ballenas está prohibida, mientras que Tokio planteará bajar el número de apoyos necesarios a mayoría simple.
Tokio firmó la moratoria total de captura de ballenas con fines comerciales establecida en 1986 para tratar de conservar la especie y ese mismo año emprendió programas de capturas científicas, los cuales son defendidos dado que tienen como finalidad la gestión de recursos marinos.
La actividad ballenera japonesa, que derivó de los supuestos fines científicos, ha sido criticada por la comunidad internacional y organizaciones animalistas, que consideran que se trata de pesca comercial encubierta, dado que la carne de los especímenes estudiados es posteriormente vendida.
Japón mantiene dos programas de este tipo, uno en el Pacífico Norte, en la costa septentrional del archipiélago, y otro en la Antártida, que fue considerado ilegal por la Corte Internacional de Justicia en marzo de 2014 por no ajustarse a “fines
científicos”. El país asiático detuvo dicho programa durante unos meses, hasta diciembre de ese año, cuando lo retomó tras introducir cambios en el programa, incluida una reducción en el volumen de capturas.
Ahora, con la reunión que se llevará a cabo en septiembre, Japón podría retomar otro tipo de caza de ballenas de manera oficial: la caza de tipo comercial.