Revelan por qué los programas de Chespirito salieron del aire
El pasado 1 de agosto, Roberto y Graciela Gómez Fernández, hijos del desaparecido comediante, 'Chespirito' (q.e.p.d.), anunciaron a través de las redes sociales, que todos los programas de su padre serían retirados de todas las televisoras del mundo, hecho que lamentaban profundamente, pues se habían transmitido por más de 47 años de forma ininterrumpida.
Y esta tarde, en entrevista con René Franco, para el programa radiofónico 'La taquilla', Édgar Vivar, de 71 años, aclaró que todo lo mencionado sucedió porque el 31 de julio de este 2020, se terminó el contrato que Roberto Gómez Bolaños tenía con Televisa, mismo que le permitía transmitir su contenido en televisoras de diferentes países.
"El contrato de por medio entre Televisa y Roberto Gómez Bolaños, donde él cedía los derechos de sus personajes y de su creación literaria se terminó este 31 de julio, a seis años de su muerte, no se renovaron los derechos", contó.
"La empresa no quiso pagar más por los derechos y Roberto Gómez Fernández es quien ahora los tiene. Había una fecha, ya se cumplió y no se renovó, ahora regresaron a los herederos, ellos no llegaron a un acuerdo con Televisa, pero sean peras o manzanas, Televisa no quiso renovar, pagar, no sé, ya son problemas entre el hijo y la empresa", agregó.
Con esta declaración, quien alguna vez dio vida a 'El señor Barriga', destapó que Televisa no quiso o no pudo llegar a un acuerdo real con 'Grupo Chespirito' para renovar los derechos, y por eso también se rompió el contrato con todas las televisoras que tenían pactados estos contenidos.
Ahora, cualquier televisora podría comprar los derechos a los herederos, y hacer uso de los personajes y contenidos: "Ahora la familia tiene todo el poder para comercializar la imagen de las creaciones del comediante", finalizó Vivar.
Sin embargo, ninguno de ellos explicó la razón por la cual se había tomado esta decisión, y sólo dejaron entrever que personas que en el pasado se vieron beneficiadas con estos proyectos, ahora afirmaban que 'ya no valen nada'.