José José ya está en su casa y así lo despide su pueblo
A más de una semana de haber fallecido en un hospital de Miami, Estados Unidos, por fin, una parte de los restos del gran intérprete mexicano, José José, ya está en territorio nacional y ya se encuentra en las instalaciones del Palacio de Bellas Artes en donde se le rinde un sentido homenaje.
Con gran expectativa, los restos del “Príncipe de la canción” eran esperados por decenas de medios de comunicación en el que era el hangar presidencial en el Aeropuerto Internacional de la Ciudad de México, a donde llegó alrededor de las 8:15 de la mañana a bordo del avión Boeing 737-8ZY con matrícula FAM-3528, perteneciente de la Fuerza Aérea Mexicana.
Las transmisiones en vivo de diversos medios de comunicación y medios electrónicos mantuvieron al tanto a las audiencias del recorrido por lo que a su paso por las calles de la Ciudad de México, cientos de personas dejaron sus actividades cotidianas para salir a las calles y despedir a este ídolo del pueblo.
Un agrupamiento de acróbatas, de la dirección de tránsito de la Secretaría de Seguridad y Protección Ciudadana, guió el cortejo fúnebre, mientras que más motociclistas y policías federales lo arroparon por la parte de atrás.
A pesar de ser un día laboral, los capitalinos se dieron tiempo de realizar una fiesta de colores en las inmediaciones de la capital, salieron al paso del cortejo fúnebre y aventaron confeti a la carroza.
Incluso, algunos salieron con flores y globos blancos para despedir al intérprete de esas canciones de amor y desamor que han pasado de generación en generación.
El trayecto del Aeropuerto Internacional de la Ciudad de México a Bellas Artes estuvo marcado por fotografías, vecinos saludando a José Joel y Marysol, y el envío de flores a la carroza en pleno Viaducto.
Al llegar al Palacio de Bellas Artes, recibieron el valioso féretro dorado con la canción escrita por Roberto Cantoral y la que sepultó la fama del Príncipe de la Canción: “La Nave del Olvido”.
Por fin acabo la novela, José Rómulo Sosa, mejor conocido como José José, reposará, aunque sea una parte de sus cenizas, en la tumba de su amada madre, cuya lápida se encuentra en el Panteón Francés.