Ángela y su familia salieron de Oaxaca para ganarse la vida
Ciudad Victoria, Tamaulipas.-“Allá en el rancho no hay trabajo, solo se cosecha maíz, así que aprovechamos las vacaciones escolares para venir a ganar un poco de dinero" dice Ángela Feliciana, una mujer mixteca en Ciudad Victoria.
Desde el 18 de diciembre Ángela, su esposo, su hijo Ismael de 7 años y una pequeña de 4, se encuentran en el centro de la ciudad, pidiendo monedas.
Ángela está sentada en la banqueta, en la calle Hidalgo, con su niña en brazos, y más allá en una esquina se encuentra Ismael, tiene un vaso en la mano para que la gente que pasa lo apoyen con una moneda.
Platicamos con Ángela, las personas al ver a su hijo podrían pensar que es objeto de explotación, a lo que ella responde.
" Yo lo tengo aquí conmigo, pero se me va de repente. Él quiere estar por su cuenta, nadie lo obliga, lo regaño y le digo que se lo pueden robar, para que entienda".
Ángela no sabe su edad, no sabe leer, y aunque cuenta con acta de nacimiento, no sabe cuantos años tiene; solo sabe que su hijo tiene 7 y la niña 4.
"Mi esposo anda en los micros, se sube a vender chicles, yo no puedo vender porque no tengo dinero para comprar la mercancía, entonces lo esperamos aquí, a las 6 nos vamos caminando al cuarto que rentamos" explica.
En San Simón, Oaxaca, hay mucha pobreza, solo se siembra maíz para el gasto, para hacer tortillas y alimentar los animales.
Ismael va a tercer grado de primaria, habla dialecto mixteco, su mamá dice que está aprendiendo un poco de español.
La ilusión del niño es regresar a su casa con un poco de dinero para sobrevivir e ir a la escuela.
" Allá en San Simón no hay casas de estas, de material. Todas las casas son de techo de lámina y palos. La de nosotros también, yo hago mis tortillas a mano, con el maíz que siembra mi esposo en la milpa, y cuando hay cosecha, porque a veces no hay nada" nos platica.
Aquí pasaron la Navidad y esperaran el Año Nuevo; por la mañana se encuentran en el 7 y 8 Hidalgo, y por las tardes afuera de la Tienda Del Sol.
Si puedes regalarles ropa, juguetes o una comida a los niños y su madre, serán bienvenidos.
" Nos iremos al comenzar las clases, mi hijo va a la escuela, solo estamos aquí en vacaciones de diciembre, a mi niña le regalaron una muñeca y al niño un carrito", finaliza Ángela Feliciana, mujer mixteca, de aproximadamente 30 años.
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